MAYONESA



Cuando tengas que hacer una mayonesa, y para evitar disgustos, es 
recomendable que todos los ingredientes que entran en su composición, estén a una temperatura
similar, por lo que saca con tiempo de la nevera los huevos que vayas a utilizar.

Para hacer una mayonesa sin utilizar huevos, mezcla dos cucharadas de leche concentrada (no azucarada) con una cucharadita de mostaza. Bate bien esta mezcla agregándole aceite, sal, pimienta y jugo de limón. 

Casca el huevo y vierte la clara y la yema en el vaso de la batidora, del minipímer.

Incorpora la sal, la pimienta, el zumo de limón, el vinagre, la mostaza... lo que necesites; agrégalos desde el principio.

Aceite suave en abundancia (unos tres dedos) y mete el brazo batidor hasta el fondo. Pon en marcha y que empiece a trabajar. Tu no lo muevas durante un rato al principio. Después y lentamente empieza a levantar y a bajar el brazo del batidor incorporando a la mezcla el aceite que todavía tienes. Así, hasta que todo el aceite se haya incorporado a la mezcla... y la está!!

Que se te ha cortado? Tranquila. Puede pasar, por supuesto. Pero no la tires. Te explico cómo hacer para "salvarla".

Puedes añadir otro huevo y volver a empezar... el problema es que te va a salir un montón de mayonesa que quizá después te sobrará y que tendrás que tirar.

Otro remedio. Saca la mayonesa cortada, líquida y ponla en una jarra. En el vaso del minipímer (no hace falta que lo laves), pon una cucharada sopera de agua caliente. Mete el minipímer y empieza a batir como la primera vez. Sólo con el agua. Al cabo de un ratito, poco rato, incorpora lentamente el líquido que tienes en la jarra. Poco a poco. Verás como se va ligando.

Ya me dirás qué tal!!

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